Enuresis infantil: cuando hacerse pis por la noche no es solo cosa de niños

Enuresis infantil

Enuresis infantil: cuando hacerse pis por la noche no es solo cosa de niños

Despertar por la mañana y encontrar la cama mojada puede ser una experiencia frustrante, tanto para los niños como para sus familias. Pero lo cierto es que la enuresis infantil, lo que comúnmente conocemos como “hacerse pis en la cama”, es más frecuente de lo que solemos imaginar, y tiene solución.

Este artículo está pensado para ofrecer una visión clara, realista y sin dramatismos sobre este tema que, aunque incómodo, forma parte del desarrollo de muchos niños.

¿Qué es la enuresis?

La enuresis es la emisión involuntaria de orina durante el sueño, en niños mayores de 5 años, edad en la que ya se espera que hayan adquirido el control vesical nocturno. Puede ocurrir varias veces por semana, o de forma más esporádica. En cualquier caso, si persiste en el tiempo, conviene prestarle atención.

Hay dos tipos principales:

  • Enuresis primaria: cuando el niño nunca ha logrado un periodo prolongado de noches secas.

  • Enuresis secundaria: cuando, después de haber estado seco durante al menos seis meses, vuelve a hacerse pis.

¿Por qué ocurre la enuresis?

No hay una única causa. La enuresis suele deberse a una combinación de factores:

  • Maduración lenta del sistema nervioso: el cerebro aún no recibe a tiempo la señal de que la vejiga está llena.

     

  • Producción insuficiente de hormona antidiurética por la noche, lo que provoca una mayor cantidad de orina durante el sueño.

     

  • Sueño muy profundo, que impide al niño despertarse con la sensación de tener que orinar.

     

  • Antecedentes familiares: si mamá o papá lo hicieron de pequeños, es probable que el niño también lo experimente.

     

  • Factores emocionales: cambios en el entorno, estrés, separación de los padres o la llegada de un hermano pueden influir.

     

Es importante resaltar que no se trata de una conducta voluntaria, y mucho menos de una forma de llamar la atención.

¿Qué podemos hacer como adultos?

Lo primero, y quizá más importante: mantener la calma y evitar castigos o reproches. Los niños no se hacen pis por pereza ni por desobediencia. Reaccionar con enfado solo agrava el problema y genera ansiedad.

Algunas recomendaciones útiles:

  • Evitar líquidos en exceso por la noche, especialmente bebidas azucaradas o con cafeína.

  • Establecer una rutina de ir al baño antes de dormir.

  • Reforzar los logros, aunque sean pequeños. Una noche seca es un paso adelante.

  • No ridiculizar ni comparar con otros niños.

  • Si ya usa pañal por la noche, valorar junto al pediatra cuándo es conveniente retirarlo.

¿Cuándo consultar a un profesional?

Si el niño tiene más de 6 años y sigue mojando la cama con frecuencia, es momento de hablar con un pediatra o logopeda especializado en control de esfínteres. En algunos casos, puede ser recomendable hacer estudios más específicos para descartar causas médicas como infecciones urinarias, problemas en la vejiga o estreñimiento crónico.

También hay tratamientos eficaces como el uso de alarmas de enuresis o intervenciones psicológicas que ayudan a reducir la ansiedad asociada.

En conclusión, la enuresis infantil es una etapa más en el desarrollo de algunos niños, no una señal de que algo esté “mal” con ellos. Acompañarlos sin presión, desde el respeto y la comprensión, marca una gran diferencia. Si bien puede generar frustración o preocupación en casa, lo importante es recordar que no están solos: este es un desafío común y, en la mayoría de los casos, transitorio.

Con el enfoque adecuado, apoyo familiar y, si es necesario, la orientación de un profesional, es posible superarlo sin dejar huella en la autoestima del niño. Porque más allá de las sábanas mojadas, lo que verdaderamente importa es que el niño se sienta seguro, comprendido y querido.